Nada más cruzar el umbral del Hotel Claridge en Madrid , te das cuenta de que estás en uno de esos establecimientos emblemáticos, elegantes y al mismo tiempo acogedor, tanto por su atmósfera intimista como por la calidez, amabilidad y sobre todo profesionalidad de su equipo humano. Si a todo esto le sumamos, además, que es accesible para personas con movilidad reducida, la elección es perfecta.
El Claridge es un hotel muy dinámico, siempre está en constante actualización, combinando diseño y tecnología. Soy cliente fiel desde hace ya algunos años y en mi última visita he podido comprobar en primera persona alguna de estas mejoras que, entre otros objetivos, facilitan la accesibilidad, lo que sin duda multiplica el valor del establecimiento a todos los niveles.
La primera de las novedades la encuentras en el mismo hall de entrada, donde un nuevo tercer ascensor, agiliza enormemente el “ajetreo” típico de un Cuatro Estrellas, gracias a la incorporación de elementos tecnológicos innovadores, más sostenibles y ecoeficientes que además de modernidad, están adaptados para personas con discapacidad tanto física como visual.


Para acceder a la zona de Salones, se ha situado un avanzado elevador para usuarios de silla de ruedas integrado estupendamente con la decoración.

Pero para mí, sin duda, uno de los “tesoros” del Claridge, lo encontramos en las nuevas habitaciones adaptadas. (Lógicamente, sujetas a disponibilidad en el momento de efectuar la reserva). Los huéspedes usuarios de silla de ruedas que puedan alojarse en una de ellas, sin duda encontrarán un espacio estudiado especialmente para hacer que su estancia sea lo más cómoda posible, gracias a muchos detalles que “marcan la diferencia”.
Por un lado, el distribuidor de entrada, más amplio de lo habitual para un mejor acceso, ya nos da idea de la optimización de estas habitaciones.

Por otro lado, la distribución y las dimensiones de la habitación facilitan enormemente la circulación de la silla de ruedas.

En cuanto al cuarto de baño, es, sin duda, el baño mejor adaptado que he visitado (Y he visto unos cuantos…) tanto por la amplitud, la modernidad de los elementos propios de la accesibilidad como barras encastradas, ducha “King size” con paneles automáticos tipo japonés para evitar salpicaduras, sistema de alarma, lavabo, espejo y resto de accesorios estratégicamente situados, como, sobre todo, por la cuidadísima selección de materiales de primeras marcas y calidad de lujo.



Si a esto sumamos dos grandes armarios accesibles, sin contorno ninguno para acceder totalmente al interior, con sistema de perchas abatibles , cafetera de cortesía, televisión, etc. el resultado es simplemente genial.


De vuelta al lobby, la cafetería con sus amplias butacas, es muy cómoda para tomar algo a cualquier hora del día. El Restaurante, al que se accede directamente desde la cafetería, cómodamente, sin barreras arquitectónicas (Con acceso directo también desde la calle) y aseo contiguo también adaptado, ofrece una cocina esmerada, con productos de temporada y un servicio excelente. Yo recomiendo cenar en la terraza exterior, con un ambiente muy agradable y acogedor. (El hotel dispone de una rampa portátil para facilitar el acceso a esta zona, previa solicitud)


Por último, el hotel se encuentra situado en un punto muy cómodo de la ciudad, pues está muy cerca del Parque del Retiro, lo que le confiere una tranquilidad alejada del bullicio que, una capital como Madrid, tiene en cualquier época del año.
Por todo ello, creo que el Hotel Claridge es un magnífico ejemplo de que Innovación, Elegancia y Accesibilidad, son perfectamente compatibles, sin que por ello el hotel pierda ni un ápice de su exquisito encanto.
Así que ya sabéis amigos, ¡Nos vemos en el Claridge!
reservas@hotelclaridge.com

(Gracias especiales a Alejandro por su ayuda con algunas fotos del hotel)
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