Por estas fechas, Ferrocarrils de la Generalitat Valenciana en Alicante (FGV), viene celebrando una serie de exposiciones temáticas con la colaboración de los municipios de la Costa Blanca y los empleados de FGV, para conmemorar el primer centenario del Ferrocarril de la Marina.
Las obras históricas de construcción del Ferrocarril se remontan a 1911 con la colocación de la primera piedra por el Rey de España, Don Alfonso XIII, en la estación de Villajoyosa y finalizaron el primer tramo de Alicante-Altea el 28 de Octubre de 1914. El resto, Altea-Denia, el 11 julio de 1915, totalizando así los 93 km. originales.
Esta infraestructura ferroviaria permitió a las comarcas de las Marinas y el Alacantí acabar con su ancestral aislamiento y facilitar la conexión ferroviaria con el resto del territorio nacional.
En los años 1937 y 1938 se construye el ramal de conexión de la estación de la Marina con el Puerto de Alicante para dar salida vía marítima a la producción agrícola de la zona. Le siguen unos años en los que este Ferrocarril desempeña un papel estratégico en el desarrollo económico, social y turístico de la Costa Blanca.
Pero la historia del Ferrocarril de la Marina está salpicada de vicisitudes que han puesto a prueba su supervivencia. Unos 30 años más tarde de la construcción del ramal al Puerto, el Ayuntamiento de Alicante, que nunca ha demostrado demasiada vocación ferroviaria, acomete el cierre del mismo y un punto intermodal con RENFE.
En consecuencia, el descabezamiento del Ferrocarril de la Marina en Alicante por el sur y el cierre de Ferrocarril Denia-Carcagente por el norte, sellan un incierto futuro para nuestra Infraestructura, que a pesar de su vocación estratégica en origen, faltó visión estratégica para que, en torno a ella, se articulara una potente conurbación lineal entre Alicante y Altea.
No obstante, en enero de 1987, la transferencia de este Ferrocarril de FEVE a la Generalitat Valenciana y la creación del Ente Público FGV, dependiente de Consellería de Obras Públicas Urbanismo y Transportes, permitió recuperar y acometer una nueva estrategia de explotación y una oportunidad para la subsistencia.
Esta nueva oportunidad se hace realidad con la llegada a la Generalitat Valenciana del Conseller José Ramón García Antón y el Director General, Vicente Dómine, prestigiosos Ingenieros, quienes convocaron un concurso para realizar el primer Estudio del Tramo Alicante-Olla de Altea, del Ferrocarril de la Marina, del que resultó adjudicataria la Consultoría BB&J Consult S.A., en julio 1998.
Mi primer contacto con los ingenieros de la consultoría fue en una reunión en Benidorm precisamente para analizar las alternativas planteadas en aquel Estudio.
El lugar elegido para el histórico encuentro no pudo ser más adecuado que el coche salón del Limón Exprés, nuestro primer Tren Turístico de España, estacionado para la ocasión en la vía de apartado de la estación de Benidorm.
Hoy recuerdo aquel momento porque simbolizó el proceso de arranque de la modernización del Ferrocarril de la Marina, gracias al cual hoy podemos celebrar su Primer Aniversario.
Recuerdo las enormes expectativas que aquel primer Estudio del Tramo de Alicante a la Olla de Altea despertó en quienes integrábamos la Delegación de FGV en Alicante.
En aquel encuentro técnico se decidió la modernización del Ferrocarril de la Marina, gracias a la coincidencia de una serie de circunstancias políticas, técnicas, turísticas y coyunturales, al amparo de las nuevas expectativas impulsadas por una novedosa estrategia de explotación de la Delegación de FGV desde la Transferencia del 1987, con el apoyo social y de medios como el Diario Información que con su difusión consiguieron que hiciéramos mejor nuestro trabajo.
Aquella nueva estrategia revitalizó al Trenet y mejoró los resultados: cobertura económica, incremento y fidelización de la demanda, seguridad e imagen, etc. Mejora de la eficiencia que propició un cambio de rumbo en la voluntad de los responsables políticos e institucionales. Porque quiero recordar que, cuando la transferencia de 1987, la voluntad del Ayuntamiento de Alicante y las propuestas de los Partidos Políticos en sus programas electorales, pedían el cierre de la Línea.
La modernización del Ferrocarril hizo posible hoy que EL TRAM DE ALICANTE sea un referente mundial entre los sistemas de transporte ferroviario, cuyas instalaciones y servicios dignifican su área metropolitana. A pesar de que otra serie de desafortunadas circunstancias impidieran acometer en su momento algunos de los importantes objetivos estratégicos de la modernización, que hubieran resuelto definitivamente y de una vez por todas la estabilidad institucional, la función estratégica y la sostenibilidad económica y social que se esperaba del TRAM.
Pero lo verdaderamente relevante hoy es que muchos padres duerman tranquilos porque sus hijos tienen al TRAM. Ese fue el interés que motivó a la Generalitat a acometer la petición popular de su modernización y ese fue también el interés profesional que motivó al equipo de ferroviarios de la Delegación de FGV en Alicante desde 1987, a trabajar incansablemente, permaneciendo voluntariamente a pie de anden hasta altas horas de la madrugada, atentos a las salidas del TRENSNOCHADOR para servir a las inéditas oleadas de jóvenes viajeros que acudían masivamente a la estación de la Marina como alternativa a sus propios medios de transporte.
Pensar que aquella estrategia evitaría que no fueran víctimas de la carretera, fue nuestra recompensa. Alguno de aquellos jóvenes viajeros son hoy los padres a los que me he referido anteriormente.
Mi reconocimiento de que este Primer Centenario del Ferrocarril de la Marina es obra de todos.
Alicante marzo 2015
Damián Uclés Fernández
Ingeniero.