Una tradición de la Edad Media
Les danses del Rei Moro, en Agost, son unas fiestas de gran arraigo en el municipio alfarero de Agost. Cuenta la tradición que su origen se remonta a la Edad Media y combina elementos históricos, culturales y antropológicos.
Estas comienzan el 26 de diciembre, pero antes, ya el 8 de diciembre, los chicos de 18 años llamados «danseros», adquieren la responsabilidad de organizar las fiestas. Lo primero será buscar un agricultor que les deje un tractor, y también un chófer. Luego este se decorará con cañas y entre todos deberán confeccionar el pregón que días más tarde se leerá en público.
La fiesta está llena de elementos simbólicos: las «paperades» (cucuruchos de papel con dulces). La primera vez que vimos estos bailes en la plaza del pueblo, nos sorprendió muchísimo que muchas personas del pueblo les echaban anisetes del cucurucho a los recogidos de las danseras. Por cierto, el recogido es una preciosidad, digno de ver. Al preguntarles por qué lo hacían, nos comentaron que para que tuvieran surte ese año.
También cobran importancia otras figuras como el palio, las máscaras, los cantos a la Reina Mora, las naranjas, los carros, las mantas, las serenatas y la música. Cada elemento tiene un significado cultural y social, reflejando la identidad y memoria colectiva del pueblo.
Los días más importantes son los de la dansa, que son del 26 de diciembre al 1 de enero.
También, la Noche de los Cohetes, el 27 de diciembre, es una noche de gran intensidad y simbolismo. La serenata a la Reina Mora y posteriormente, la noche de Cohetes. Durante el recorrido, los vecinos lanzan cohetes y carretillas al Rey Moro y su séquito, creando un espectáculo pirotécnico. Al final, el palio es quemado en la plaza del Ayuntamiento, y los danseros cuelgan ristras de naranjas en los balcones como símbolo de paso generacional.
El 28 de diciembre es el día más destacado de las danzas. El Rey Moro y la Reina Mora encabezan la danza, acompañados por sus respectivos séquitos y la música de dulzaina y tabalet. El Rey Moro desfila montado a caballo y la Reina Mora es recibida con aplausos y vítores al salir de su casa. Durante la danza, los acompañantes del Rey Moro lanzan «paperades» (cucuruchos de papel con dulces) al público y a los danseros, mientras los espectadores participan activamente en la celebración.
4. Día de Año Nuevo (1 de enero)
Este día se celebra la «guerra de paperades» entre los jóvenes de 17, 18 y 19 años (naranjeros, danseros y quintos). Los naranjeros decoran un carro con vegetación y recorren el pueblo pidiendo donativos. En la plaza del Ayuntamiento, los grupos escenifican una batalla lanzándose paperades, mientras los naranjeros suben a los balcones para descolgar las naranjas, simbolizando el paso del testigo para organizar las danzas del próximo año.
La fiesta de las Danzas del Rey Moro son en definitiva un ritual de iniciación y un espacio de sociabilidad para los jóvenes, donde se celebran la transición al mundo adulto.