La provincia de Alicante, con sus más de 200 kilómetros de costa, ofrece mucho más que playas y clima templado. Su red de puertos deportivos y pesqueros, configura un ecosistema náutico diverso, donde conviven actividades recreativas, formación marítima, experiencias turísticas y cultura marinera.
Desde Dénia a Pilar de la Horadada, pasando por Jávea, Altea, Campello, Alicante, Santa Pola o Torrevieja, los puertos de la provincia se han convertido en auténticos centros de dinamización turística, ofreciendo servicios que van desde el chárter náutico y el paddle surf, hasta el buceo, las rutas en kayak o la navegación a vela.
Vela: la experiencia de navegar con el viento
Entre todas las actividades náuticas, la navegación a vela destaca por su capacidad de conectar al navegante con el entorno de forma profunda y auténtica. Lejos del ruido de los motores, navegar a vela exige lectura del mar, comprensión del viento y trabajo en equipo. No se trata solo de deporte: también es turismo activo, formación vivencial y contemplación del paisaje litoral desde otra perspectiva.
En este sentido, la provincia de Alicante cuenta con empresas especializadas que, desde los propios puertos, ofrecen formación en vela ligera y de crucero, salidas guiadas, prácticas para titulaciones náuticas y travesías de mayor recorrido.
Travesía Dos Islas: Benidorm y Tabarca, una experiencia que une costa, mar y patrimonio
Un ejemplo singular de este tipo de experiencias es la Travesía a Vela Dos Islas: Benidorm y Tabarca, organizada por la Escuela de Navegación Santa Pola.
Durante el mes de julio, tuve la oportunidad de participar en esta actividad con un recorrido continuo de aproximadamente 18 horas, en este ocasión, sin escalas, navegando de día y de noche entre Santa Pola, la isla de Benidorm, isla de Tabarca y Santa Pola.






La travesía, realizada en un velero Beneteau Oceanis 50, combina instrucción práctica y emoción navegante, con momentos únicos como el atardecer en alta mar, la navegación nocturna bajo las estrellas o el amanecer frente a Tabarca. Todo ello, acompañado de turnos, maniobras reales, planificación de rumbo, observación de faros y siluetas costeras orientados por la carta náutica.
🎥 Puedes ver un resumen en vídeo aquí:
Más allá del componente técnico o deportivo, la actividad permite descubrir cómo el litoral alicantino, especialmente desde el mar, revela otra dimensión del destino: más pausada, más natural y más conectada con su historia.
Tabarca: patrimonio, mar y Mediterráneo en estado puro
El cierre de la travesía frente a la isla de Tabarca, única isla habitada de la Comunidad Valenciana y declarada conjunto histórico-artístico, otorga a esta experiencia un valor añadido turístico y cultural. Tabarca no solo es un enclave perfecto para fondear y explorar. También ofrece una combinación difícil de igualar entre patrimonio, gastronomía y paisaje protegido.
Degustar una paella de marisco o un caldero, disfrutando de unas vistas privilegiadas al mar, como ofrece el restaurante La Muralla, es el colofón perfecto para recuperar fuerzas.






Una oportunidad para la desestacionalización turística
Apostar por el turismo náutico y por propuestas como la navegación a vela es también apostar por una desestacionalización real y sostenible del turismo en la provincia de Alicante. Estas experiencias se pueden vivir más allá de los meses de mayor afluencia, y ofrecen al visitante un producto con identidad, vinculado al paisaje, al esfuerzo humano y a la tradición marinera del territorio.
🧭 Alicante tiene puertos, tiene viento y tiene horizonte. Solo hace falta que fijes tú el rumbo.